6 razones por las que necesitamos ir a la Iglesia

Hay muchas cosas en la vida de las que puedes prescindir, pero la iglesia no es una de ellas.
¿Has oído alguna vez a alguien preguntar por qué tenemos una Iglesia? ¿O por qué la necesitamos? ¿Por qué no podemos rezar por nuestra cuenta: ir a la montaña o a la playa, o a algún lugar especial donde nos sintamos cerca de Dios, y con eso basta?

No hay duda de que puedes sentirte cerca de Dios en cualquier lugar (de hecho, ¡es una muy buena idea!), pero nuestro Padre celestial tiene mucho más reservado para ti que la mera espiritualidad. Quiere que seas lo mejor que puedas ser. De hecho, quiere que heredes todo lo que Él tiene y que obtengas la vida eterna. Y tiene un plan y una organización para que eso suceda. Su plan es el plan de salvación y la organización que ha instituido es la Iglesia de Jesucristo : “la única Iglesia viva y verdadera sobre la faz de la tierra”.

Razón Uno: Para aprender y practicar el evangelio de Jesucristo

Una de las bendiciones que tenemos como miembros de la Iglesia es la oportunidad de aprender la plenitud del Evangelio (véase D. y C. 1:17-23). Si tenemos un deseo sincero de aprender y somos humildes, orantes, diligentes y obedientes, podemos obtener un testimonio y esperanza en la resurrección y expiación de Jesucristo.

A través de los líderes y los textos de la Iglesia, también aprendemos otros puntos doctrinales esenciales, como la restauración del Evangelio, el llamamiento de los profetas modernos y la verdadera naturaleza de la Divinidad. Vivir de acuerdo con la verdadera doctrina nos trae alegría y felicidad.

Segunda razón: Recibir ordenanzas y pactos esenciales

Las ordenanzas en las que participamos y los convenios que hacemos son necesarios para volver a la presencia de nuestro Padre celestial y vivir con él. Estas ordenanzas y convenios requieren el sacerdocio, que sólo se encuentra en la verdadera Iglesia de Dios. Sin estos convenios, estaríamos perdidos.

Tercera razón: Ayudarse mutuamente en el camino

D. Todd Christofferson, del Colegio de los Doce Apóstoles, enseñó: “Una de las principales razones por las que el Señor tiene una iglesia es para crear una comunidad de santos que se apoyen mutuamente en el ‘camino estrecho y angosto que conduce a la vida eterna’ [2 Nefi 31:182]”.

En la iglesia, podemos formar relaciones afectuosas con los demás. Podemos ayudarnos mutuamente en tiempos difíciles si nos guiamos y conducimos unos a otros y caminamos codo con codo (véase “Soy hijo de Dios”, Himno 193; Efesios 2:19). Jeffrey R. Holland, de los Doce Apóstoles, dijo: “Todos somos hijos de Dios, y debemos enseñarnos unos a otros; debemos ayudarnos a encontrar ‘el camino correcto’.3” ¡La Iglesia es el lugar para hacerlo!

Cuarta razón: Ayudar a las familias a optar a la vida eterna

Otra de las principales razones por las que existe la Iglesia es para ayudar a las familias a cualificarse para la vida eterna. La ordenanza del sellamiento en el templo permite a las familias estar juntas eternamente. Para que esto suceda, debemos vivir de una manera que nos haga dignos de recibir estas bendiciones. La Iglesia ayuda a los miembros de la familia a ayudarse mutuamente a lograrlo.

Como enseñó el hermano Christofferson: “El objetivo de la enseñanza del Evangelio y de las ordenanzas del sacerdocio que efectúa la Iglesia es que las familias puedan tener derecho a la vida eterna. Por lo tanto, la Iglesia nos ayuda a guardar esos convenios y a apoyarnos mutuamente a lo largo del camino.

Quinta razón: Ser una bendición para la gente en todas partes

El Hermano Christofferson ha dicho que cuando trabajamos juntos en la Iglesia, nuestro Padre Celestial puede “realizar cosas necesarias que no pueden ser hechas por individuos o grupos más pequeños “5.

¿Sabías que cada año, durante los últimos treinta años, la Iglesia ha donado cuarenta millones de dólares en ayuda, asistencia humanitaria y proyectos de servicio? Las generosas donaciones y el servicio voluntario que prestan los miembros de la Iglesia hacen posible realizar cosas que no podrían hacerse de otro modo.

A través de nuestro extraordinario programa misionero, los misioneros llevan la luz del Evangelio a personas de todo el mundo. Casi ciento cinco mil misioneros (jóvenes adultos y personas maduras) están actualmente en misión. ¡Es increíble! Es más que la población de algunas ciudades.

Y, gracias a las generosas donaciones de los miembros, la Iglesia tiene los medios para construir templos en todo el mundo. En abril de 2018, había ciento ochenta y dos templos en el mundo, en servicio, en construcción o anunciados.

Sexta razón: Establecer el reino de Dios en la tierra

Una de las razones más importantes por las que Dios ha establecido una Iglesia es que es su reino aquí en la tierra (véase D. y C. 65). El Señor dio las llaves del sacerdocio a José Smith y a todos los profetas y apóstoles después de él. El hermano Christofferson enseñó: “Con la autoridad de estas llaves, los oficiales del sacerdocio de la Iglesia preservan la pureza de la doctrina del Salvador y la integridad de sus ordenanzas salvadoras “6.

Por medio de los líderes de la Iglesia, el Señor puede administrar Su obra y servir a Sus hijos. Sin esta guía, toda clase de conceptos erróneos y enseñanzas equivocadas podrían llevarnos por senderos oscuros y prohibitivos. En otras palabras: para ayudarnos a saber cómo obtener la vida eterna, necesitamos la protección que nos brindan los profetas y apóstoles a quienes Dios ha llamado y ordenado verdaderamente. Sólo en su Iglesia la tenemos.

Testimonios de miembros de nuestra comunidad cristiana

La Iglesia está ahí para que seamos iluminados y se conozca la verdad. Gracias a la Iglesia, tengo el conocimiento que necesito: el conocimiento del plan de salvación.

Miguel M., Iglesia de Léon, Guanajuato

Gracias a la Iglesia, puedo tener una familia eterna con mis padres y mis hermanas, y con mi propia familia algún día.

Daniel G., Iglesia de Zapopan, Jalisco

Tenemos la Iglesia para crear un entorno en el que los miembros puedan reunirse y ayudarse mutuamente a aprender y crecer. Existe para ayudar a los miembros a parecerse más a Cristo, animando a todos a tender la mano a los demás y llevar las cargas de las personas a las que quieren y cuidan. También es un lugar seguro para que la gente viva sus creencias.

Carlos P., Iglesia de Mérida, Yucatán

A través de la Iglesia seguimos el camino que conduce a la inmortalidad y a la vida eterna, donde podemos vivir con nuestro Padre Celestial y nuestra familia para siempre.

Tania T., Iglesia de Coyoacán, Ciudad de México

A través de la Iglesia podemos recibir ordenanzas, hacer pactos y asegurarnos de que nuestras familias queden selladas para la eternidad. Es la organización, instituida por nuestro Padre Celestial en la tierra, la que posee la autoridad y el poder del sacerdocio. Enseñar a las personas la verdad del Evangelio e ir a Cristo y preparar a las personas para la exaltación. La Iglesia nos ayuda a difundir el amor y el Evangelio por todo el mundo y a llevar la luz a un mundo oscurecido por la inmoralidad.

Israel B., Iglesia de Pachuca de Soto, Hidalgo

La Iglesia nos ayuda a mantener la organización y las enseñanzas y a crear una red de personas en las que los miembros pueden confiar. Mediante el establecimiento de la Iglesia, el Señor se asegura de que se enseñe la verdadera doctrina. La Iglesia proporciona a los miembros revelaciones, principios y directrices para ayudarnos a vivir como Cristo quiere.

Gabriela F., Iglesia de Tijuana, Baja California

La Iglesia nos ayuda porque nuestro Padre celestial sabía que nuestra época sería difícil. Sabía que necesitaríamos un profeta que nos guiara. Él nos conoce.

Alberto P., Iglesia de Ecatepec de Morelos, Estado de México

La Iglesia hace posible hacer cosas que uno no podría hacer por sí mismo.

Emma D., Iglesia de Ciudad Juárez, Chihuahua

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